VIVIR SIN DAR CUENTA DE MIS ACTOS. ROMANOS 14:11-12

 

SER RESPONSABLE DE MI VIDA

 Romanos 14:11-12 
"Porque escrito está: Vivo yo, dice el Señor, que ante mí se doblará toda rodilla,  Y toda lengua confesará Dios.  De manera que cada uno de nosotros dará a Dios cuenta de sí"

Vivir sin dar cuentas de mis actos, es una forma de expresión muy común entre las personas hoy, cuando años atrás no era un pensamiento presente socialmente. Vivir es un privilegio que tenemos que valorar, pero que también es una responsabilidad que recibimos con nosotros mismos y con los demás seres humanos, con los que nos relacionamos de manera directa, pero también con los que no nos relacionamos. Somos seres sociales, con la capacidad de relacionarnos, comunicarnos y expresarnos. Donde podemos ayudarnos unos a otros, estableciendo valores básicos como el respeto, el amor, la tolerancia, entre otros, para que nos permitan una convivencia sana y libre de problemas.

La vida tiene muchas implicaciones, para poder disfrutar este tiempo que tenemos sobre esta tierra, que solo es un instante.  No podemos concebir una persona que tenga el pensamiento de individualismo “sin dar cuentas de mis actos a nadie”, porque no estamos solos, donde quiera que estemos nuestras conductas y nuestras actitudes tendrán que estar bajo un filtro de las reglas, los principios, los valores, la moral, la ética, la religión y la ley, este contexto les exigirá una responsabilidad y un privilegio, quiera o no quiera, será la aplicación de la responsabilidad de “dar cuenta de sí “.

Cuando alguien piensa en el hecho de no dar cuenta a nadie de sus acciones, se puede considerar algunas razones de su pensamiento: Primero, su carácter y pensamiento de vida es rebelde, es decir, va en contra de lo establecido. No obedecerá lo establecido, querrá hacer sus propias reglas, aunque sean correctas las que están, porque no tiene disciplina para dominar sus impulsos de hacer solo que le gusta, no es diligente en sus responsabilidades o no se esfuerza para cambiar.  Segundo, la filosofía individualismo del mundo, un empoderamiento del “yo” por encima de los demás; personas, padres e instituciones. Estás ideas influenciada principalmente a través de los medios masivos de comunicación. Por medio, de diferentes contenidos, programas, música, redes sociales, entre otros.  Generando, estilos de vida y de pensamiento, que pueden llevar a una generación a que crean que nadie le pueden decir nada, ni exigirle cambios en sus comportamientos, conductas o hábitos. No permitiendo la información, la formación y el aprendizaje que molde su persona para vivir con responsabilidad de "si mismo".

Podemos compartirte que “vivir” no es una anarquía (desorden sin autoridad), no es solo hedonismo (hacer solo que me causa placer), no es relativismo (tener o respetar lo que veo bueno a mi perspectiva). En nuestro paso por este mundo daremos siempre cuenta de nuestras acciones aquellos que estén en la autoridad de pedirnos razones, y eso nos pondrá limites a nuestra conducta para no lastimar a las personas a nuestro alrededor y presentarnos socialmente con un equilibrio emocional y mental.

     

Pero, tenemos que considerar, sobre todos tenemos que dar cuenta a nuestro Dios de cada una nuestras conductas. Somos creación de Dios, y no somos seres independientes. Hoy tenemos la oportunidad de la decisión de cumplir con los principios y mandamientos bíblicos, pero viene el tiempo que nuestra decisión tendrá su recompensa o su castigo. Estaremos delante del Trono del Padre, donde “se doblará toda rodilla” reconociendo que existe, y será el tiempo para que se cumpla, “toda lengua confesará a Dios” que es poderoso, que somos de él, y no éramos dueños de hacer lo que queramos conforme nuestros deseos, impulso o beneficio.  Todo lo que hacemos tiene una responsabilidad. Considera lo siguiente:

Hay siempre responsabilidades sobre nuestra vida:
1. Delante de Dios 
2. Delante de nuestros padres
3. Delante de nuestras relaciones
4. Delante de nuestras autoridades

La mejor forma de vivir correctamente, es tener conciencia de quienes somos, con quién estamos y a donde vamos.

• Individualismo

• Anarquía

• Hedonismo

• Relativismo

• Rebeldía 

Cuando somos sensibles sobre los que creemos y lo que debemos creer, tendremos la capacidad de conocer que viene el tiempo de hacer cambios, de "Vivir para agradar y obedecer a Dios", que no nos pertenecemos, somos de él.

La observación de nosotros o las personas con este lema “quiero vivir sin dar cuenta de mis actos”, nos permitirán saber, si se tienen los pensamientos o ideas de los siguientes conceptos:

ORACIÓN DE OBEDIENCIA

Ayúdame Señor a poder entender que no soy dueño(a) de mí. Tu eres mi Dios, y eres digno de todo reconocimiento. Ayúdame porque me es difícil poder obedecer o sujetarme a los demás, a lo que me piden que haga o no haga. Solo tu me puedes cambiar y llevarme a la obediencia y a disfrutar tu Palabra que me dirige, en el nombre de Cristo Jesús mi Salvador. Amén.